“Desde la primera vez que vine, hace 9 años, no falté nunca. Me gustan muchos las motos y el ambiente de Diamante es espectacular, muy lindo y muy familiar, por lo que este año vengo con mi señora porque mis chicos no pueden. Siempre la pasamos bien”, aseguró.
“Este año no pude venir con mi Gilera 215 modelo 79 porque tuve problemas mecánicos, por lo que vine en esta moto que compré hace unos días”, contó Gustavo.
En cuanto al Complejo Turístico Valle de la Ensanada, un predio de 12 hectáreas donde se realiza el evento, comentó: “Está muy lindo y bien limpito. La atención, los baños, el agua caliente, la leña, siempre encontramos lo que necesitamos para estar cómodos”.
“Asisto a los motoencuentros de la región, sobre todo en Santa Fe. La primera vez que vine a Diamante me dio bronca porque vine un solo día. Ya con el correr de los años siempre agregamos un día más”, bromea.
Gustavo remarca que lo primordial para pasarla bien es “relajarse, olvidarse del trabajo, disfrutar de la música y de los amigos que siempre encontramos”.
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